Paisajes habitados

Denia y su entorno

Una ciudad al abrigo del Montgó

Situada en la costa norte de la provincia de Alicante, Denia es una localidad encuadrada entre la montaña y el mar. Famosa por sus playas (20 km de costa), entre las que se pueden encontrar playas solitarias para el veraneante que busca la paz y la tranquilidad y otras con actividades deportivas y lúdicas para aquellos turistas que prefieren la diversión y el deporte, Denia destaca, entre otras cosas, por la existencia de un monumento al clima. Y, como paisaje, el valor añadido del azul de sus aguas, un parque natural (el Montgó) que se levanta, según afirmó Vicente Blasco Ibáñez, “como mano de gigante”, o “como vigía de un litoral habitado desde hace más de 4.000 años”. Sin embargo, este enclave de la Costa Blanca es mucho más. Su patrimonio da buena cuenta del esplendor histórico del que fue protagonista y de su conversión en una ciudad moderna, en la que el ocio y la gastronomía mediterránea ocupan un lugar destacado. En este sentido, cabe indicar que desde el 11 de diciembre de 2015 fue declarada Ciudad Creativa de la Gastronomía por la UNESCO (con el lema Saborea Denia).

 

Actividad socio-económica: de una base agrícola y portuaria a una ciudad de servicios y de base turística

Hasta la gran revolución que supuso la explosión turística del último tercio del pasado siglo, la base económica de esta población se fundamentaba en la agricultura, la pesca, el comercio marítimo y la artesanía basada en el palmito. Los principales cultivos eran de secano (vid, olivo, algarrobo, higueras, almendros y trigo). El importante crecimiento de la población durante los últimos tres siglos llevó al aprovechamiento de cualquier terreno que pudiera ser transformado en agrícola. En las últimas décadas del siglo XIX, la fuerte demanda de pasas para consumo propio y para la exportación propició el aterrazamiento de las laderas del Montgó para el cultivo de la uva de Moscatel. Actualmente las vides que todavía se cultivan en la zona, se destinan para producción de vino dulce en su mayor parte, la afamada Mistela de la Marina Alta.

En la actualidad, estos usos tradicionales se encuentran en franca regresión y el predominio corresponde a los usos turístico-residenciales que se han traducido en una notable transformación paisajística cuyo elemento definidor ha sido la proliferación de urbanizaciones de baja densidad que se desarrollan por gran parte del término municipal y ascienden por las laderas del Montgó. Las condiciones climáticas (caracterizadas por la existencia de unas 3.000 horas de sol y unas temperaturas suaves en invierno) y las belleza de sus playas van a ser los elementos en los que se fundamente el desarrollo de esta actividad económica, que se traduce en un notable incremento de la población y la llegada de importantes colectivos de población extranjera. En este sentido, Denia contaba en 1960 con 12.185 habitantes y en 2015 esta cifra ha ascendido a 41.553, siendo el 27% población extranjera, mayoritariamente europea. A pesar del predominio del turismo de sol y playa, en los últimos años se han llevado a cabo iniciativas que tratan de diversificar su oferta mediante la puesta en valor de recursos patrimoniales, culturales y etnográficos. La ruta del Riurau es un buen ejemplo de ello.

 

Un turismo favorecido por el medio físico

A lo largo del frente marítimo abierto al norte y noreste, se suceden las costas bajas y arenosas, con marjales inmediatas, como ocurre en la zona septentrional (conocida como Les Marines) y las costas recortadas y acantiladas de Les Rotes, que alcanzan su máxima dimensión en la Cova Tallada en el sector más meridional del término municipal. Estas playas están reconocidas por los certificados ISO 14001 (gestión medioambiental) e ISO 9001-2000 (gestión de la calidad). En el sector septentrional destacan las playas de Les Deveses, l’Almadraba, Els Molins, Les Bovetes, Les Marines, Albaranes y Punta del Raset. Esta última se trata de una playa semiurbana, puesto que es la más cercana al casco urbano que dispone de todas las facilidades para el disfrute de una jornada de playa. Les Marines, con 3 km de extensión y galardonada con la Bandera Azul en 2015, se caracteriza por la tranquilidad para quien busca el disfrute en familia. La zona de Les Rotes se caracteriza por sus numerosas calas (la mayoría de piedra) como son La Marineta Cassiana, El Trampolí, La Punta Negra, Les Arenetes o La Cala.

El Montgó, antiguamente llamado Kaón (753 msnm) fue declarado Parque Natural el 16 de marzo de 1987. Con una superficie de 2.117 Ha, y comprendido entre las poblaciones de Denia y Xàbia, alberga más de 650 especies de flora; estando su espacio constreñido por los usos residenciales dada las vistas que desde sus laderas se tiene del Mediterráneo. La Oficina de Turismo de Denia, punto informador colaborador (PIC) de dicho parque, ofrece información relacionada con las características del Parque Natural, itinerarios y actividades que se desarrollan en él. Como lugares de interés, cabe señalar la Cova de l’Aigua, que destaca, entre otras cosas, porque en su entrada, se ubica una inscripción romana datada del año 238 d.C. También se han encontrado restos que evidencian su uso en época ibérica y más tarde en época islámica.

La Reserva Natural de San Antonio, a los pies del Cabo de San Antonio, es un espacio protegido de alto valor ecológico que ocupa 900 hectáreas. En sus fondos marinos se hallan especies tales como corales, praderas de posidonia oceánica, etc. En cuanto a la fauna marina: cigalas, meros, gorgonias, etc. En su espacio se permite el baño y buceo en apnea, la navegación de embarcaciones sin motor y la navegación a velocidad moderada así como el amarre en las boyas disponibles.

 

Origen e historia de Denia: un rico patrimonio a revalorizar

La Denia de hoy día es heredera de diversas culturas. Íberos, romanos, musulmanes y cristianos han dejado un legado que se puede descubrir a través de monumentos, museos, restos arqueológicos y en el callejero urbano. Aunque con indicios arqueológicos de poblado ibérico (Diniu), su origen como ciudad es romano (Dianium). En la época musulmana, alcanzó el momento culminante de su expansión, que se tradujo en una gran vitalidad cultural. Daniyya fue la capital de la taifa creada en 1010 por el amiri Muyahid al-Amiri al-Muwaffaq. Con la reconquista cristiana, en 1244, registró un notable retroceso poblacional, acentuado por la expulsión de los moriscos, de los que 25.000 embarcaron desde el puerto de Denia con destino a Berbería, como recogió Vicente Mostre en una pintura (1613).

Diversos son los elementos patrimoniales de los que dispone la ciudad entre los que cabe citar su castillo y la centro histórico. El castillo de Denia, monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC), corona la ciudad desde lo alto de un cerro. De estructura árabe (s. XI-XII), se entremezclan estilos posteriores y antiguos vestigios romanos. En la parte oriental del Castillo (Torre de Galliner) se reconocen restos de estructuras de época romana. En la actualidad, donde se ubicó posteriormente el Palau, se pueden observar los restos del Palau Vell (s. XIV). Los restos del Palau del Marqués de Denia (s. XVI) se limitan a la sala de piedra, la galería (ambas componen el actual Museo Arqueológico) y restos de la escalinata “a la imperial” caracterizada por su forma de T invertida.

La configuración de la antigua villa de Denia es resultado del paso de las civilizaciones y avatares históricos que quedan plasmados en tres sectores urbanos (Les Roques, el centro histórico y el barrio de Baix la Mar). Les Roques corresponde al área donde se asentaba la antigua medina árabe (a los pies del castillo). El área urbana conocida como “centro histórico” se localiza al sur de la antigua medina árabe, donde se estableció la población cristiana tras la Reconquista. Y en tercer lugar, por su singularidad, destaca el barrio de Baix la Mar (s. XVI), característico por sus calles estrechas y casas de colores mediterráneos. La vinculación con el mar de este barrio ha estado siempre presente ya que hasta la década de los setenta vivieron allí los pescadores, rodeados de almacenes e instalaciones para el comercio marítimo. La fachada marítima del barrio es también zona de paseo y terrazas, donde las vistas nos descubren el pequeño puerto local, el puerto deportivo El Portet (al fondo, en la escollera norte), el monumento del ancla, que rinde homenaje a la tradición pesquera de Denia, que fue hallada en sus aguas, y a escasos metros, el monumento de Bous a la Mar, fiesta declarada de interés turístico nacional que se celebra en la segunda quincena de julio.

 

Otros valores: la importancia de su pasado agrícola y marítimo

Los recursos naturales y culturales se complementan con otros vinculados a su pasado agrícola y a su ubicación relativamente próxima a la costa norteafricana. De su pasado agrícola, cabe destacar la presencia de diferentes árboles monumentales como la Olivera del Diluvi (entre 700 y 800 años de antigüedad) y el Garrofer (algarrobo) de la Plaza, situado en la pedanía de La Xara (de uno 300-400 años). También es digno de mencionar la producción vitivinícola, y en relación con su legado arquitectónico, la presencia de los llamados riurau, que se localizan en esta comarca de la Marina Alta. Los riurau estaban dedicados a tareas agrícolas, principalmente a la elaboración y secado de la pasa a partir de la uva que, dispuesta sobre cañizos, quedaba protegida del rocío de la noche. En Denia, destaca el Riurau del Senyoret (mitad del s. XIX), siendo uno de los más grandes de la comarca.

La proximidad a la costa norteafricana determinó que durante los s. XV-XVII, la costa mediterránea española registrase diversas incursiones de piratas berberiscos, que desde el norte de África, llegaban a la costa europea para saquear, atacar y raptar a la población. Denia no fue una excepción. Para defenderse de actos de pillaje, se creó una infraestructura de vigilancia consistente en una red de torres vigías y fortificaciones a lo largo de toda la costa mediterránea. En Denia, quedan vestigios de 3 torres. La Torre de l’Almadrava (o del Palmar), declarada Bien de Interés Cultural, fue concebida para la protección de un punto de abastecimiento de agua dulce y la almadraba situada en las cercanías. La Torre de Carrals se trata de una casa-torre construida en el s. XVI de planta cuadrangular y cuatro alturas, donde se refugiaban los habitantes de la casa y alrededores para protegerse de las incursiones piratas. En el Montgó, se conserva la Torre del Gerro (Torre del Jarrón), de cuerpo troncocónico y datada en el s. XVI, situada en lo alto de les Planes, al final de les Rotes. En ella está grabado el escudo de Carlos I, bajo una de sus ventanas. Su posición privilegiada permitía el control de casi todo el golfo de Valencia.

 

Álvaro Francisco Morote Seguido
Instituto Interuniversitario de Geografía
Universidad de Alicante

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Fotos

Castillo desde el puerto (foto Miguel Lorenzo). Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción (foto Miguel Lorenzo).Ayuntamiento de Denia (foto Miguel Lorenzo).Torre del Castillo (foto Miguel Lorenzo).Playa de les Rotes (foto Miguel Lorenzo).Playa de les Rotes (foto Miguel Lorenzo).Playa de les Rotes (foto Miguel Lorenzo).Puerto de Denia y al fondo el castillo y el Montgó (foto Miguel Lorenzo).

Mapas

Citas

Joan Fuster (1971). Viatje pel País Valencià.

“Un castell, en el tossal immediat a la ciutat, domina el seu afany incessant. Gairebé junt a les muralles comença la població, primer en carrers estrets, empinats, de cases emblanquinades, per a després desenvolupar-se. Amb amable urbanitat, en la plana costanera. Al port, un barri de pescadors lleument pintoresc.”

Antonio J. Cavanilles (1797). Observaciones sobre la historia natural, geografía, agricultura, población y frutos del Reyno de Valencia.

“En Denia empiezan las raíces de Mongó, y luego cuestas rápidas hasta la misma cumbre terminada en loma obtusa. Desde ella se gozan horizontes vistosos, el mar hacia el oriente quanto alcanza la vista, hacia el norte el Marquesado de Denia seguido de Segarria, los pueblos conocidos con el nombre de Marina al sur, y al poniente hasta los elevados montes que cortan la vista los del valle de Xaló y Murla. El Mongó se prolonga de oriente a poniente, y va disminuyéndose su altura hacia los extremos, de los quales el oriental forma dentro del mar el cabo de San Antonio; el occidental, situado hacia el lugar de Gata, se une con los cerros y montes que llegan a incorporarse con los de Lahuar.”

Bibliografía

Agencia Estatal de Meteorología (2015).

Diponible en: http://www.aemet.es

Ayuntamiento de Denia (2016).

Disponible en: http://www.denia.es

CAVANILLES, A. J. (1797).

Observaciones sobre la historia natural, geografía, agricultura, población y frutos del Reyno de Valencia. Madrid: Imprenta Real (Edición facsímil, Valencia, 1981).

CEBRIÁN, R. (1991).

Montañas valencianas IV: El Comtat y La Marina Alta. Papers de muntanya IV. Valencia: Servei de Publicacions del Centre Excursionista de València.

FUSTER, J. (1971).

Viatje pel País Valencià. Joan Fuster, Obres completes. Barcelona: Edicions 62.

Instituto Nacional de Estadística (2015).

Censos de demografía y población. Padrón de habitantes 2015. Disponible en: http://www.ine.es

MOROTE SEGUIDO, A. F. - MEDINA ARAGÓN, R. E. (2015).

“La Huerta de Alicante y sus torres de defensa: Propuesta de una ruta turística”. Cuadernos de Turismo 35. 287-309.

VV. AA. (2009).

Gran Enciclopedia Temática de la Comunidad Valenciana. Historia. Valencia: Editorial Prensa Valenciana.