Paisajes de montaña y forestales
La transformación de un ferrocarril minero en Vía Verde
La vía férrea Ojos Negros-Sagunto se construyó exclusivamente para el transporte del mineral de hierro desde las minas de Sierra Menera en Ojos Negros (Teruel) hasta la playa de Sagunto. Edificaron un muelle en la costa saguntina para facilitar las exportaciones, lo que dio lugar al nacimiento de la nueva ciudad portuaria del Puerto de Sagunto. La Compañía Minera de Sierra Menera se hizo cargo de la explotación de las minas, de su transporte, su embarque y su comercialización, abasteciendo con posterioridad a la factoría de la Compañía Siderúrgica del Mediterráneo, denominada años después Altos Hornos del Mediterráneo. Este ferrocarril de vía estrecha tenía un recorrido de 204 km. Comenzó su actividad en 1907 y continuó hasta la suspensión definitiva del servicio en 1972. Entre 1933 y 1940 no funcionó, por la crisis siderúrgica internacional y por la Guerra Civil. En los 58 años que estuvo en funcionamiento transportó más de 25 millones de toneladas métricas de mineral de hierro, con un máximo de 948.999 toneladas en 1913 y un promedio anual de 435.112 toneladas. A partir del año 2001 gran parte de su recorrido se ha convertido en Vía Verde, siendo la más larga de España, con un trazado continuo de 167 km.
Esta compañía fue creada por los empresarios vascos D. Ramón de la Sota y Llano y su primo Eduardo Aznar el 3 de septiembre de 1900, con un capital de 32 millones de pesetas. Formaban un grupo financiero y empresarial con empresas como la Naviera Sota y Aznar, la Compañía de Seguros La Polar, Euskalduna, así como el Banco de Comercio, que en 1901 se fusionó con el Banco de Bilbao. Además ya tenían explotaciones mineras en Setares (Cantabria), desde 1886, y en la Sierra Alhamilla (Almería), desde 1893. La CMSM disponía de una organización comercial a escala internacional. El objetivo de la Compañía Minera Sierra Menera es la explotación a escala industrial de las minas de hierro situadas en las dos vertientes de la Sierra Menera. Además de la extracción del hierro con técnicas avanzadas, la compañía tuvo que construir un ferrocarril de más de 200 km para dar salida al material, y un puerto para su carga, con vistas a su comercialización, por lo que se edificó un embarcadero en la playa de Sagunto. El 10 de enero de 1902 la reina regente María Cristina firmó la Real Orden que autorizó la construcción del ferrocarril, y el 11 de agosto de 1902 el rey Alfonso XIII firmó la Real Orden que concedía la licencia para la construcción de un embarcadero. El objetivo de la compañía fue, desde un principio, ampliar el negocio a la actividad siderúrgica, para controlar el ciclo integral de producción del hierro, instalando unos altos hornos para la transformación del mineral en laminados. Esto no se produjo hasta 1917, cuando D. Ramón de la Sota y Llano y D. José Luis de Aznar forman la Compañía Siderúrgica del Mediterráneo.
El coto minero de la Sierra Menera se localiza entre los términos de Ojos Negros (Teruel) y Setiles (Guadalajara) y está formado por 24 minas de hierro, con una extensión de 1.569 ha. La Sociedad Echevarrieta y Larrinaga, propietaria de los cotos mineros, firmó con la Compañía Minera de Sierra Menera el 20 de octubre de 1900 un contrato de arrendamiento de 60 años, prorrogables otros 60 años más, con un canon de una peseta por tonelada extraída, con un mínimo de 500.000 toneladas anuales. La explotación de las minas de Sierra Menera se realiza a cielo abierto, por lo que no ofrece grandes dificultades técnicas. El mineral tenía una escasa dureza, lo que facilitaba su extracción. Sin embargo su carácter pulverulento lo hacía inaplicable directamente en los altos hornos. Esto obligó a la compañía a instalar una planta para realizar el aglomerado del mineral en forma de briquetas.
La Compañía Minera de la Sierra Menera negoció con el ferrocarril Central de Aragón el transporte del mineral hasta el puerto de Valencia. Este ferrocarril de vía ancha era de capital belga y hacía el recorrido Calatayud-Valencia, pasando por Caminreal, Teruel y Sagunto. No se llegó a un acuerdo por las divergencias en el precio por tonelada/kilómetro y por la necesidad de colocar el mineral al menor coste posible, lo que llevó a la compañía minera a la construcción de su propio ferrocarril. El ferrocarril Central de Aragón intentó entorpecer la construcción de la línea y generó varios litigios con el ferrocarril Ojos Negros-Sagunto por la invasión de servidumbres, ya que su trazado discurre paralelo al suyo durante el 85% de su recorrido. El Tribunal Contencioso Administrativo falló en 1905, permitiendo la instalación de la línea al alegar que era de servicio general y que no contaría con subvenciones estatales.
El complemento para el ferrocarril fue el embarcadero para la carga de minerales procedentes de las minas de Ojos Negros, que se construyó en 1904 en la playa de Sagunto. Se edificó además una escollera y diversas obras de acondicionamiento. Permitía una carga entre 1 y 3 millones de toneladas métricas anuales. La construcción del puerto supuso la fundación de la población del Puerto de Sagunto, que se vio aumentada con la posterior instalación de la Compañía Siderúrgica del Mediterráneo.
Las obras de construcción se iniciaron en 1903 y concluyeron el 22 de junio de 1907. El primer cargamento de mineral circuló hasta Sagunto el 17 de julio de 1907, con un convoy formado por una máquina y quince vagones de 20 toneladas cada uno. Se trata de un ferrocarril de vía estrecha, de un metro de anchura, que tiene una longitud total de 204 kilómetros, de los cuales 117 discurren por la provincia de Teruel, 62 por Castellón y 25 por Valencia. Atraviesa treinta términos municipales, que en la parte valenciana corresponden a las comarcas del Alto Palancia y el Camp de Morvedre. Su financiación es exclusivamente privada y su presupuesto alcanzó los 25 millones de pesetas (21 para el ferrocarril y 4 para el embarcadero).
A la empresa se le exime de realizar servicio público, ya que solicitaron dedicarse exclusivamente al transporte del mineral. Por ello se construyen 18 estaciones alejadas de los núcleos de población, con sus correspondientes viviendas, para atender un servicio permanente. Estaban distanciadas entre sí de 9 a 14 km. En Castellón se sitúan las de Barracas, Torás-Bejís, Caudil, Jérica y Segorbe, y en Valencia las de Algimia de Alfara, Gilet y Puerto de Sagunto. Su trazado es paralelo en muchos lugares al ferrocarril Central de Aragón, aunque aprovechando mejor la topografía del terreno. Salva un desnivel superior a los 1.250 metros, con 18 túneles (con una longitud global de más de 3 km, siendo el más largo el de Jérica, con 424 m), 26 puentes y varios viaductos, destacando el de Albentosa, con 160 m de longitud, siete arcos y 48 m de altura. En algunos tramos está hecha la doble vía. Este ferrocarril era uno de los mejores de su época y disponía de puentes de obra construidos con arcadas de fábrica, mampostería, sillería de aristones y arcos de cabeza, y sillarejos en las bóvedas.
La línea férrea se dividía en dos secciones: 1) Ojos Negros-Puerto de Escandón: el tramo entre Teruel y el Puerto de Escandón es de los más difíciles, ya que en 19 km tenía unos 300 m de desnivel; 2) Puerto de Sagunto-Puerto de Escandón. El personal residente en Ojos Negros llevaba los trenes cargados de mineral hasta Puerto Escandón, retornando a Ojos Negros con los vagones vacíos; y el personal residente en Puerto de Sagunto subía con los trenes vacíos y descendía desde Puerto Escandón con los vagones cargados. Los itinerarios estaban aprobados con su horario correspondiente, para mantener el servicio las 24 horas. El ferrocarril se utilizaba puntalmente para el transporte de calizas de las canteras de Segorbe, Navajas y Gilet hasta la siderúrgica de Sagunto, y para las piedras de escollera, necesarias en el mantenimiento de las obras portuarias. En los viajes de retorno a Ojos Negros se transportaba carbón para los hornos de briquetas, locomotoras, balasto, traviesas y raíles.
El 28 de agosto de 1917 se constituye la Compañía Siderúrgica del Mediterráneo, sociedad perteneciente al mismo grupo financiero, con un capital de 100 millones de pesetas. Se buscaba crear una fábrica de producción de acero a partir del mineral extraído de la Sierra Menera y así no tener que depender de las ventas en el extranjero. En 1923 y 1926 se inauguraron los dos altos hornos. Con la instalación de esta planta siderúrgica en Sagunto se alcanza la producción integral, con el ciclo completo de extracción del mineral, transporte por ferrocarril y fundición y tratamiento en el alto horno.
Entre 1933 y 1940 el ferrocarril de Ojos Negros-Sagunto estuvo paralizado a consecuencia de la difícil coyuntura económica nacional e internacional, y a partir de 1936 por la Guerra Civil. El régimen franquista incautó los bienes de Ramón de la Sota, que había fallecido en 1936 y e impusieron a sus descendientes una multa de 100 millones de pesetas. El conflicto bélico dañó seriamente las instalaciones ferroviarias, ya que los raíles eran arrancados en algunos tramos y se dinamitaron algunos sectores como el viaducto de Albentosa. La extracción del mineral y su transporte por el ferrocarril no se pudo reanudar hasta 1941. Después de la guerra las acciones de la Compañía Minera Sierra Menera y de la Naviera Sota y Aznar pasan a D. José Luis Aznar, el hijo de D. Eduardo Aznar. En 1940 la Compañía Siderúrgica del Mediterráneo y el puerto son adquiridos por la empresa Altos Hornos de Vizcaya, S. A., aunque su producción sigue dependiendo del mineral que llega de Ojos Negros. En los años 50 hubo un gran impuso de la siderurgia nacional y extranjera, por lo que se amplían las instalaciones con la inauguración de otro alto horno. En 1971 pasa a denominarse Altos Hornos del Mediterráneo y el Gobierno le adjudica el proyecto de la IV Planta Siderúrgica Integral, de la que solo se ejecuta la primera fase.
En 1968 los nuevos ejecutivos de la Compañía Minera Sierra Menera deciden desmantelar el ferrocarril de Ojos Negros-Sagunto. Para ello suscriben un “Acta de Acción Concertada” el 8 de febrero de 1969, confirmada por el Decreto del 24 de julio de 1970. El 29 de julio de 1972 se produce el último convoy con minerales hasta Puerto de Sagunto. Durante unos años fue, paradójicamente, RENFE, heredera del ferrocarril Central de Aragón, quien se encargó del transporte. Después de tres meses, y una vez finalizados los trabajos para construir una vía de ancho normal hasta el km 23 y desde allí un ramal de 5,8 km hasta la estación de RENFE de Santa Eulalia, el 24 de octubre de 1972 comenzó el servicio. Esta solución no resultó económica, ya que el transporte de RENFE para los minerales de hierro se incrementó un 180% en 1977 sobre 1970. La crisis mundial del sector siderúrgico a mediados de los años 70 y las dificultades financieras de la empresa minera suponen su progresivo declive. La finalización de las actividades de los Altos Hornos del Mediterráneo en 1984 acelera también el cese de las actividades en 1987 de la Compañía Minera de Sierra Menera. Aunque se estima que quedan numerosos minerales en el yacimiento de Sierra Menera los costes de extracción y transporte son muy elevados.
La transformación del ferrocarril de Ojos Negros-Sagunto en una vía verde ha posibilitado que exista un trazado continuo entre Santa Eulalia (Teruel) y Algimia de Alfara (Valencia). Su recuperación como vía verde se ha producido entre 2001 y 2008. Desde su creación se ha convertido en un itinerario muy frecuentado y posee una gran aceptación por parte de los visitantes, tanto en bicicleta como a pie. Comienza en la provincia de Castellón por el término municipal de El Toro y pronto entra en el páramo de Barracas. Posteriormente desciende el alto del Herragudo y se adentra en el valle del río Palancia. Continúa una bajada continua que pasa por Caudiel y Jérica. La antigua estación de Jérica se halla habilitada como punto de información de la ruta. El tramo entre Algimia de Alfara y el Puerto de Sagunto no forma parte todavía de la vía verde, aunque existe un proyecto para su puesta en funcionamiento. Esta vía verde está incluida en la Red Nacional de Caminos Naturales.
El trazado ha sido adecuado para las necesidades de los usuarios. Se han protegido las zonas más peligrosas con barandillas, se ha cerrado el acceso de vehículos y los túneles tienen iluminación automática. El pavimento posee un firme mixto, de asfalto y zahorra compactada. Durante el trayecto hay habilitadas zonas de descanso bien acondicionadas cada 6 km. En su recorrido discurre por espacios abiertos, túneles, trincheras y viaductos, lo que nos permite apreciar la belleza del trazado del antiguo ferrocarril y su entorno natural.
Miguel Antequera Fernández
Jorge Hermosilla Pla
Departamento de Geografia,
Universitat de València
DE LA SOTA Y LLANO, R. (1902). Memoria Junta General de Accionistas Compañía Minera Sierra Menera
(CMSM). Celebrada el 18 de marzo de 1902. En GIRONA RUBIO, M. (1989):
Minería y siderurgia en Sagunto (1900-1936).
“Asunto muy complejo era determinar el trazado más conveniente para nuestro ferrocarril, pues se ofrecían hasta seis soluciones distintas. Después de minuciosos trabajos de campo se desecharon las soluciones de Vinaroz por Utrillas y la de Valencia siguiendo la cuenca del Turia, la que nos ofrecía por sus dos vertientes el río Mijares y la de la izquierda del Palancia, quedando como la más práctica bajo todos los conceptos la de seguir el curso de este último río por su ladera derecha”
Sarasola, A. (1999). Minas y ferrocarril Ojos Negros-Sagunto, Siderurgia integral. Testimonio
de un ingeniero en la dirección de una empresa 1947-1967.
“El ferrocarril de vía estrecha estaba calculado para un mínimo de 500.000 toneladas anuales para obtener rentabilidad y un máximo de un millón de toneladas. En aquella época (principios de siglo) un millón de toneladas a 200 km del puerto de mar era una cifra récord (…) Se construye la infraestructura del ferrocarril con puentes, viaductos, túneles, obra maestra de la ingeniería; su director es el ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, don Luis Cendoya, autor también de las obras del puerto y de la infraestructura de la siderúrgica de Sagunto, construida hacia los años 1918-1920”.
Hernández Villaplana, R. (2010). Las Vía Verde de Ojos Negros.
“El 12 de mayo de 2002 era inaugurada la Vía Verde de Ojos Negros 1, desde el límite entre las provincias de Teruel y Castellón, situado cinco kilómetros y medio antes de la población de Barracas, hasta Algimia de Alfara. Así, 30 años después de que la recorriese el último ferrocarril, caminantes y ciclistas podían disfrutar de una esplendorosa naturaleza, en especial cuando tras el tramo de Barracas se inicia un interminable descenso a lo largo de un espectacular tramo repleto de trincheras”.
ARRIBAS NAVARRO, D.; SANZ HERNÁNDEZ, A. (2012)
De los montes de Teruel a las playas valencianas. La actividad minero-siderúrgica de la Compañía Minera Sierra Menera. En http://www.um.es
GIRONA RUBIO, M. (1989)
Minería y siderurgia en Sagunto (1900-1936). Col·lecció Politècnica Nº 37. Ed. Alfons el Magnànim, Institució Valenciana d’Estudis i Investigació, 510 pp.
GRUPO DE ESTUDIOS CMSM (2003)
La Compañía Minera de Sierra Menera. Breve historia de una gran empresa. En http://www.docutren.com
HERNÁNDEZ VILLAPLANA, R. (2007)
Las Vías Verdes de la Comunitat Valenciana (y el trazado turolense de la vía de Ojos Negros). Carena editors, S. L., 278 pp.
HERNÁNDEZ VILLAPLANA, R. (2010)
Las Vía Verde de Ojos Negros. Carena editors, S. L., 103 pp.
PIQUERAS, M. A. (2006)
El Ferrocarril Ojos Negros-Sagunto: de tren minero a vía verde. CD-ROM. Ed. Orla Digital S. L.
SARASOLA, A. (1999)
Minas y ferrocarril Ojos Negros-Sagunto, Siderurgia integral. Testimonio de un ingeniero en la dirección de una empresa 1947-1967. Alba Editorial S. L., 137 pp.